¿CUÁL PUEDE SER EL EFECTO DE LA INCOMUNICACIÓN O LA MALA COMUNICACIÓN EN LOS SERVICIOS DE SALUD SOBRE LA CALIDAD DE LA SALUD DE LA POBLACIÓN?
ALUMNA: GIANELLA MARÍA ASCA OSCCO
La mala comunicación o inclusive la incomunicación de parte de profesionales de la salud con los pacientes no es una situación indiferente o ajena en la mayoría de los establecimientos de salud. La pandemia del covid-19 y la tan creciente tecnología provocó un cambio rotundo en cómo se comunican y relacionan profesionales de la salud y pacientes, siendo estas solo algunas causas. Asimismo, al pasar los años hemos observado como la comunicación entre médicos y pacientes, se limitó en múltiples formas, como falta de contacto físico, falta de cercanía con el paciente, muestras de desinterés, entre otras, trayendo múltiples consecuencias, entonces la situación nos lleva a preguntar ¿Cuáles serían los efectos de una falta de comunicación o una ineficiente en los servicios de salud con la población? Ante esto, se puede evidenciar que la falta de comunicación provocó o generó una falta de confianza en el personal de salud, intranquilidad de los pacientes, una ruptura en el vínculo de empatía y compasión, conllevando todo esto a un mal diagnóstico y tratamiento inoportuno que inclusive podría desencadenar que los pacientes se automediquen.
La capacidad de poder formar un vínculo eficaz de comunicación con los pacientes es esencial para su tratamiento, como se menciona en un artículo sobre la importancia de la comunicación médico-paciente, la comunicación no debe servir solo un medio para obtener información que el médico necesite, sino debe servir como un vehículo para una interacción real con el paciente, en el cual el paciente se sienta escuchado, comprendido, entienda su enfermedad y sea coparticipe de su tratamiento, asimismo, no solo en términos de enfermedad sino también en relación con la prevención (1).
La tecnología en las últimas décadas ha avanzado notablemente en pro de la salud de los pacientes, sin embargo, esta gran tecnología ha calado y se ha interpuesto relativamente en la relación entre médico y paciente, por ejemplo, mucho de los médicos ya no tienen un contacto físico con sus pacientes para examinarlos, limitándose a un estudio netamente por aparatos tecnológicos, haciendo que exista un obstáculo en la interacción entre ellos, provocando una mala comunicación. Otro claro ejemplo, es la situación que se vive hoy en día provocada por la pandemia del covid-19, por ejemplo, la telemedicina y la restricción del contacto físico con los pacientes (2). Todo esto llevo a la incorrecta comunicación o la falta de ella, provocando diversas consecuencias como la falta de confianza de los pacientes, el sentimiento de alejamiento y falta de interés hacia ellos, provocando inclusive que no puedan comprender o seguir con éxitos sus tratamientos, llevándolos a la automedicación por la falta de esa confianza con el personal de salud.
En conclusión, la incomunicación de los pacientes o la población en sí, con los profesionales de la salud, traen consigo múltiples consecuencias, debido a que no se cumple el objetivo primordial de cuidar y preservar la salud integral de las personas reforzado a través de una eficaz comunicación. Esta incomunicación provoca que la confianza se pierda, la falta de contacto físico trascienda como inseguridad en los diagnósticos de los médicos y, por ende, un mal seguimiento de los tratamientos, provocando que la salud no se recupere totalmente.
BIBLIOGRAFÍA
Ma F-O, Hernández- Hernández MA. Medicina Familiar 2006 Importancia de la comunicación médico-paciente en medicina familiar The Importance of Physician-Patient Communication in Family Medicine [Internet]. Medigraphic.com. Recuperado de https://www.medigraphic.com/pdfs/medfam/amf-2006/amf062k.pdf
Villalobos J, Calvanese N. La relación médico-paciente en tiempos de COVID-19. ¿Un cambio de paradigma? Rev Med Chil [Internet]. 2021. 149(7):1070-4. Recuperado de https://www.scielo.cl/pdf/rmc/v149n7/0717-6163-rmc-149-07-1070.pdf