NO QUIERO LEER: ¿No me gusta la lectura o no me gusta leer?

Autor.

Lipa Tardio, Blanca Elizabeth

Actualmente, las estadísticas indican cifras inquietantes sobre la poca costumbre de la lectura y su efecto en el desarrollo de los estudiantes. Ya sea por defectos en el sistema educativo, por una inapropiada motivación de la lectura o por una preferencia a la desvalorización de la lectura, por la prioridad de lo visual; este es un problema que se debe entender y buscar soluciones. Los últimos resultados de las pruebas del Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA) de comprensión lectora no son nada favorables para el Perú. La lectura es fundamental para promover la capacidad cognitiva y el pensamiento crítico en los alumnos tanto de primaria, secundaria, universitarios, entre otros. Un alumno con dificultades en la comprensión de lectura tendrá serias obstrucciones en su desarrollo profesional y en la edificación de su ciudadanía. La carencia de lectura genera menor libertad, porque quita la posibilidad de estar preparados para saber elegir. Reduce, además, nuestra experiencia vital al aquí y ahora, a los límites que nuestra existencia nos impone, a lo que vemos y oímos a nuestro alrededor. La lectura, sin embargo, amplía las oportunidades, más allá de la realidad cercana, hace que se derriben las barreras históricas y geográficas de la vida y descubrir el mundo para brindar crítica sobre él con la intención de mejorarlo.

Cuetos (1) indica que la comprensión de textos es el proceso más complejo y donde más problemas surgen durante la lectura, puesto que se requiere de una serie de operaciones y estrategias, es decir, entender lo que la persona lee exige aumentar habilidades para su comprensión, e inclusive se suele presentar en adultos que tienen escasez de estas estrategias. De la misma manera, señala que aquellos que no recepcionan bien lo que leen son señalados como analfabetos funcionales, ya que pueden decodificar el texto, pero no les resulta ventajoso, porque no logran alcanzar el mensaje fundamental que posteriormente será añadido en la memoria, es decir, que el individuo no realiza una imagen mental del contenido que es imprescindible para el proceso de comprensión. También debemos recalcar que para poder tener una mejor recepción de lo leído se debe entender lo que se lee, esto se ve demostrado en las investigacion realizada el 2015 en el Perù (2) que se hicieron a diversos colegios públicos tanto de lima como de la sierra.

En el plan lector se defiende mucho la lectura más cercana al estudiante, más relacionada con su costumbre de vida, sus gustos, temores, deseos y sueños. Y esto es un buen inicio para atrapar como lectores. Sin embargo, no se deberían desechar de plano las ya conocidas "Obras clásicas", pero sí modificarlas ligeramente a las particularidades del grupo de estudiantes que se tenga.(3)

Según el Consejo Nacional de Educación, los peruanos leen a penas un libro al año, un preocupante promedio de 0,86. En la esfera educativa, muchas veces se conoce la lectura como un deber o una carga. Se la atribuye como una serie de obligaciones que no tienen ningún vínculo con lo que realmente se significa la lectura. La lectura, como ejercicio cognitivo, es magnífico, y en la edad escolar no sería necesario acompañarla de tareas, trabajos o controles de lectura, por consiguiente, si se desea que los estudiantes lean, no se debe convertir la lectura en una obligación, sino en una acción que dé placer y produzca una sensación de crecimiento y que sea gratificante.

¿Cómo se podría motivar a los estudiantes en el hábito de lectura?

Se deberá convertirlo en una acción placentera, y no en una obligación o tarea Convertir el salón en un ambiente en el que el diálogo sea principal, más que las exposiciones o las evaluaciones escritas. Es cierto, que existe un nivel de evaluación de comprensión lectora que es imprescindible en el desarrollo de enseñanza-aprendizaje, pero no se debería privar del protagonismo a la experiencia de la lectura, al poder de capturar el conocimiento de las nuevas realidades, de distinguir el sentido de lo que se escribe, de mejorar con lo que se lee y de divertirse plenamente porque al hacerlo se van convirtiendo en mejores personas.

CONCLUSIÒN

En conclusión, en el Perú, si gustan de leer, el defecto es que no atrapan a los niños con la lectura, no es solo leer, es entender, se debe explicar cada letra si es posible, para que desde un inicio adentren en el mundo de la lectura. Esto es fundamental, ya que como se mencionaba antes, esto ayudaría a un mejor desarrollo cognitivo, traería consigo beneficios tanto para la vida universitaria como para el día a día; se despertaría el sentido crítico, inclusive se formarían mejores ciudades, con conciencia, y como consecuencia se podría decir que se tendría mejores gobernantes. El maestro es la guía para todo este proceso, por eso debe desarrollarlo con la responsabilidad respectiva y sobre todo con su sentido de vocación, ya que esto llevaría a que el docente agregue todo el amor a su profesión. El amor a la lectura no es solo en los salones, sino también las casas, con los familiares. Si queremos un Perú mejor, se debe mejorar la lectura.

BIBLIOGRAFÌA.

(1) Cuetos F, Vega FC. Psicología de la lectura. WK Educación; 2010.

(2) Portalinfancia. Metas claras para aprender mejor.avi [Internet]. Youtube; 2011 [citado el 2 de noviembre de 2022]. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=CLicc7uHJfQ 

(3) Ch S. Perú aborda el desafío de impulsar la compresión lectora de sus niños [Internet]. swissinfo.ch. 2021 [citado el 2 de noviembre de 2022]. Disponible en: https://www.swissinfo.ch/spa/per%C3%BA-lectura_per%C3%BA-aborda-el-de saf%C3%ADo-de-impulsar-la-compresi%C3%B3n-lectora-de-sus-ni%C3%B1o s/46718848